En semillero protegido o cama caliente:
- Lechuga
- Apio
- Pimiento
- Berenjena
- Cebolla
- Col
- Escarola
- Sandía
- Tomate
Siembra Directa:
- Acelga
- Espinaca
- Rábano
- Zanahoria
- Borraja
- Guisante
- Habas
- Rúcula
- Canónigos
- Judías
- Calabacín
- Melón
- Pepino
- Cebollino
- Patata
- Espárragos (garras)
- Espárragos (garras)
Los espárragos son plantas que requieren ante todo paciencia. Si los sembramos por semilla pasaran al menos 4 años hasta que podamos cosechar los primeros ejemplares, aunque si conseguimos las garras (las raíces podremos adelantar algunos años esa espera. Las garras de espárragos tenemos que sembrarlas bastante profundas. Tenemos que hacer una zanja de unos 35 o 40 cm de hondo y de lo mismo de ancho. Ponemos una capa de unos 5 o 10 cm de buen compost o estiércol maduro, y repartimos las garras cada 60 cm, procurando extender bien sus raíces. Después cubrimos con buen compost sin apretar demasiado la tierra. El primer año es mejor no recolectar ningún esparrago para que las raíces cojan fuerza. El segundo año podremos recolectar durante un mes, y el tercer año durante 2 meses y dejar descansar el resto del tiempo. Si tenemos paciencia y no forzamos a la planta, tendremos espárragos durante 10 años. Si vamos sembrando garras paulatinamente cada dos o tres años, siempre tendremos plantas fuertes de las que podemos cosechar, y plantas de renovación que debemos respetar. Un truco para tener espárragos grandes y blancos, es ir aporcándolos cada vez que asomen las puntas, de esa forma seguirán creciendo sin perder su blancura.
En cuanto a la patata, recomiendo sembrarlas en un bancal a parte, y no meterlas en el ciclo de rotación ya que siempre quedan bulbos que no recolectamos y que de un año para otro volverán a multiplicarse estorbando al cultivo que toque en ese ciclo de rotación Un buen método (que mas adelante explicaremos) es cultivarlas en un barril o una bolsa de jardín, de esa forma las tendremos confinadas y no se nos perderán por la tierra de cultivo.
Prácticamente todas las aromáticas se pueden sembrar ya por semilla o multiplicarlas por división de la mata.
En cuanto a la poda, es el momento de podar prácticamente todos los árboles, ya que las heladas se suponen mas suaves que los meses anteriores.
Y podéis aprovechar los restos de poda para multiplicar por estacas, como el olivo, que es un árbol que admite esta multiplicación muy fácilmente. Elegir ramas jóvenes que tengan todas las cruces de ramas posibles (de ahí saldrán las nuevas raíces y ramas), cortar dichas ramas y dejar solo la principal. Y enterrarla completamente. Mantener la humedad, y esta primavera tendremos un nuevo árbol.
